La manzanilla es una flor con propiedades terapéuticas y cosméticas, utilizada desde la antigüedad. Sus principales propiedades incluyen efectos antiinflamatorios, analgésicos y relajantes musculares, siendo útil para tratar trastornos digestivos, dolores menstruales, ansiedad y problemas de sueño. Además, la manzanilla es rica en antioxidantes, lo que la convierte en un ingrediente popular en productos para el cuidado de la piel y el cabello. También se ha demostrado que la manzanilla tiene propiedades antimicrobianas y antiulcerosas, lo que la hace adecuada para el tratamiento de heridas y úlceras. En general, la manzanilla es una flor versátil y beneficioso para la salud.